ETZETERA – Music is magic

Sé que juego con ventaja sobre todos cuando hablo de esta canción. Es impresionante la evolución que ha tenido, si bien es verdad que no es la mejor canción del mundo, solo los jóvenes descerebrados que escuchamos la primera versión podemos saber, el cambio radical de este tema.
Me he parado a escucharla intentando desmenuzar el sonido de cada instrumento utilizado y me he encontrado con algo que no me esperaba.
Desde la primera vez que escuche este tema haya por el 97 o 98, no recuerdo muy bien, he pensado que es como los grandes temas del rock, que gustan porque son sencillos como las canciones de bebe (las nanas), pero he descubierto un entresijo de emociones entre las notas que lo componen y que fluyen entrelazadas como las raíces que crecen para dar alimento a una bella flor. Eso es lo que nos encontramos delante cuando escuchamos Music is Magic, una bella melodía que apela a la felicidad cuando encuentras el sitio que te corresponde. He disfrutado como un niño escuchando por ejemplo como las notas del bajo hacen de puente entre los arpegios de la rítmica y los rasgueos de guitarra, como la bateria le da el toque feroz al suave punteo, como la voz se hace uno con la distorsión de los acordes, en definitiva, como este sinónimo de canción de cuna se desmenuza en una gran y complicada maraña de sonidos puestos a conciencia y que nos devuelve este regalo en forma de single.
La letra no se queda atrás, pues nuestro artista aparenta estar compartiendo sensaciones sin sentido, fingiendo ser un pintor dando brochazos de colores sin sentido. Nada más lejos de la realidad cuando se van consumiendo el tiempo de la melodía y está sin razón de sentimientos encontrados convergen todos en un fin bellísimo como es el gran regalo de la música, y todos esos brochazos de colores terminan en un estético cuadro, en nuestro caso, creando una simbiosis inmejorable entre armonía y letra.
Resumiendo, que me he dejado llevar por la nostalgia, tiene todos los alicientes de un gran clásico, evolucionado pero permitiendo entrever los orígenes del tema y al mismo tiempo dejando la puerta abierta para una posible segunda evolución, pero siempre con la esencia de la canción que en un principio fue y quedará grabada en mi memoria.